Por la modernización del sistema educativo español
“Yo soy producto de la educación”
Carmen de Michelena –
Casa de la Cultura de Tres Cantos. 10 de mayo de 2007
Datos
biográficos
Madrid, 1914. Ingresó en la Residencia de
Estudiantes, muy vinculada a la Institución
Libre de Enseñanza, que fundara Giner de los
Ríos, donde se congregaron intelectuales de la
época con la intención de regenerar una España
que se adentró en una decadencia moral tras el
desastre colonias en Cuba, Puerto Rico y
Filipinas en el año 1898. Coetánea de insignes
escritores, poetas y pintores como Dalí, Lorca,
los Hermanos Machado con los que tuvo relación
directa.
Curso sus estudios en Ciencias Químicas y
muestra su orgullo por haber recibido el
magisterio de grandes químicos que fueron
cabezas mundiales en distintas investigaciones.
De Michelena menciona a Arturo Durperier, Físico
Nuclear, especialista en Rayos Cósmicos, quien
tuvo que marchar a Inglaterra para desarrollar
sus investigaciones. En el país anglosajón
alcanzó prestigio.
En tiempos de Franco no se le permitió entrar en
España. También fue alumna del Catedrático
Enrique Moles, experto en desintegración atómica
y cuyas investigaciones tuvieron su vigencia 20
años después.
Gracias a ellos, conoció a Albert Einstein y
Madame Curie.
Desde su más plena juventud ha rechazado y
denigrado las injusticias sociales, por ello ha
luchado y trabajado por mitigarlas. También ha
mostrado más afecto y cariño por los más
débiles, los pobres, las mujeres y los niños.
Ingresó en la Residencia de Estudiantes, muy
vinculada a la Institución Libre de
Enseñanza, que fundara Giner de los Ríos
Cursó sus estudios en Ciencias Químicas,
cuando la universidad estaba aún vetada a
las mujeres y más aún en el campo de las
ciencias.
Su labor en este campo ha sido reconocida y
galardonada: Premio a la Democracia y
Libertad ’Plácido Fernández Viagas’,
instaurado desde hacer catorce años, siendo
a la primera mujer que se lo conceden. Su
trayectoria se ha visto jalonada por el
galardón 28 de Febrero, en el cual se premió
un reportaje sobre su vida en el programa de
Canal Sur TV ‘Los Reporteros’. El galardón
lo recogió en el Parlamento de Andalucía. En
1984 funda la Asociación Cultural El Yelmo,
donde las mujeres han recibido cursos de
Ortografía, Cerámica, Tapices,... pretende
que hombres y mujeres participen de una
forma equitativa. En el entorno de la
comarca de la Sierra de Segura ha exhibido
una labor incansable por propagar el
asociacionismo femenino y dice haberse
encontrado con mujeres y en general con una
población inquieta, vivaz, inteligente
dispuesta a elevar el nivel sociocultural de
la comarca.
Doña Carmen de
Michelena tuvo la amabilidad de charlar con el
Grupo Literario Encuentros en la Casa de la
Cultura de Tres Cantos. Fue encuentro abierto,
en el que se habló sobre la educación. (*)
Me alegro mucho de estar con
vosotros. Agradezco a Rodrigo y a Graciela que
con la mediación de mi hija, me hayáis
proporcionado estar aquí con este grupo, que
para mí es importantísimo para el aprendizaje,
para la belleza y para la vida entera, que es la
cultura de la lengua y la literatura. (..)
Estamos en una situación,
contra lo que nos dice todo el mundo en los
medios de comunicación ¡cómo está España…! ¡
pues está fenomenal! Y está fenomenal porque
todos estamos trabajando para que esté cada vez
mejor y poner nuestro grano de arena. Nuestro
grano de arena, que no es que no encontremos la
playa. Está la playa. Está la burguesía. Está la
ciudadanía entera. Estamos todos propicios a que
todo vaya mejor. Tenemos una serie de problemas
inherentes a las temperaturas que son terribles
y más que van a ser…y a la cantidad de ondas que
tenemos en la atmósfera, etc. etc., pero que
tenemos un momento fantástico para la cultura y
la poesía mundial.
No nos vamos a estar mirando a
nosotros mismos. Es la era del razonamiento. Es
la era del aprendizaje. Es la era y la hora de
terminar con el egoísmo y la cosa ridícula y
mala basándonos en la historia, y tener en
cuenta que la historia es la maestra de la vida
para promocionar lo que fue bien y olvidar, o
por lo menos no repetir, lo que fue mal. De
manera que estamos en un momento crucial para
que sigamos adelante.
Sigo… (…) Soy una consecuencia de
la educación. Como todo el mundo, los que están
bien y los que están mal, somos una consecuencia
de lo que o bien hemos sufrido o bien hemos
promocionado. Y yo soy una consecuencia de lo
bueno. Yo estaba predestinada a ser alumna de la
Institución Libre de Enseñanza. (…)
Mi padre era profesor de una zona
negra en aquellos tiempos, ya menos negra, que
es la provincia de Jaén. Tuvo relaciones muy
significativas por la época con Antonio
Machado, que era profesor de francés en Baeza.
Los dos profesores, los dos buenos andadores,
caminaban por Úbeda y se reunían en el café
Comercial, comentando, haciendo y promocionando
la idea que Francisco Giner de los Ríos estaba
tratando de poner en evidencia, porque la
universidad española estaba mal, francamente
mal. Estaba sometida a un clasismo exagerado.
Allí lo que prevalecía era la pobreza de la
gente del pueblo, la incultura, a tal extremo
que había un 75% de analfabetos y eso era
intolerable.
Entonces la universidad estaba
gozando del privilegio de que solamente las
clases pudientes llegaban a la universidad. Se
estaban perdiendo inteligencias. Y esto es lo
que me ha llevado a mí a contarles esto… (…)
Francisco Giner, que no conocí,
porque él murió en el año 15, un año después de
estar yo en el mundo, pues sus ideas filosóficas
a través de sus seguidores han seguido conmigo y
son las que me han empujado a través de esta
vida y a ser fuerte. Fuerte físicamente,
moralmente, socialmente. Es esa vida la que yo
intento y me entusiasmaría que alguien recogiera
lo que dice. Así, vamos a seguir la trayectoria.
Vamos a seguir la trayectoria porque no se puede
perder un momento. Hay que seguir con la
cultura, porque es una alegría el poderse
comunicar.
Vamos a seguir con la literatura,
que es una maravillosa manera de expansionarse y
de dar lo que llevas dentro. Que no tiene nada
que ver con que seamos de ciencias. Yo he hecho
ciencias puras y sin embargo me encanta todo.
¿Os digo por qué? Por la Institución de
Enseñanza Libre y porque os estaba diciendo que
había sido predestinada.
Porque de aquellas conversaciones
de mi padre con Antonio Machado surgió la
necesidad de dejar aquella provincia, de dejar
la enseñanza de los pueblos, irse a Madrid y
hacer algo para tener un colegio, una escuela
con aquellas ideas filosóficas de Giner de Los
Ríos y ¡adelante!... y a buscar una casa,
primero una mujer madrileña con quien casarse y
la encontró rápido y después una casa,
precisamente, si ustedes conocen el barrio de
Chamberí, don Juan de Austria, paralela a
Martínez Campos, donde estaba ya la Institución
Libre de Enseñanza, para que le costara menos
trabajo… Así que, allí nací yo y desde los cinco
años asistí a la Institución… (…)
Pues la Institución, con un
sistema pedagógico maravilloso que surgió por la
imposibilidad que tenía Giner de modificar
directamente la universidad y pensó que había
que hacer al hombre desde niño, por eso surgió
la Institución Libre de Enseñanza que en el año
1875 abrió sus puertas.
Eso le costó a Giner perder la
cátedra, meterle en el Castillo de Santa
Catalina de Cádiz prisionero. Allí lo llevaron
los guardias como si fuera una cosa criminal lo
que estaba haciendo, dispuesto por todas las
autoridades, los gobiernos, pero él seguía con
la necesidad de hacer hombres, con una
filosofía buena, sana, una ética que llevaba a
todos. Decían sus palabras: tenemos que juntar a
los de abajo con los de arriba. Al agricultor,
al artesano, al labrador, a todos los que
quieren llegar y no han llegado, a los que
ya tienen sentido de la luz, pero que todavía no
ven. Hay que juntarlos con los de arriba, con
los que tienen la idea y la política más pura en
inteligencia y en enseñanza.
Y eso fue. Eso fue todo. La
institución no era elitista. Nos ponían verdes,
yo creo que no merece la pena ni siquiera
decirlo, porque todo lo que vale es siempre muy
mal tratado. Dicen que era elitista. No era
elitista. La Institución tenía un alumnado
heterogéneo, porque había una financiación, [que
después yo he fundado mi colegio, y me he
arruinado, porque no podía con esta sociedad de
los 70 y 80 de este siglo pasado.]
No podía llevar ese sistema. Era que el profesor
no cobraba. Cobraba el profesor que necesitaba
para vivir. Los alumnos pagaban según sus
posibilidades económicas y la cuota máxima era
de 25 pesetas. Con eso, yo, que he sido alumna
de la Institución Libre de Enseñanza, con un
documentito, que tengo como una gala mi primer
recibo. “Antigua alumna de la Institución Libre
de Enseñanza: 1 peseta”. Y con estos
procedimientos económicos la Institución salía
adelante. Pero de elitista nada. Era elitista
porque, claro, era otra cosa que nos achacan,
contra religiones. Nada de eso. Respetuosos con
todas las religiones.
En el buen sentido, porque ahora
la palabra se usa muy alegremente. Respetuosos
con todas las religiones, completamente
respetuosos. Porque la religión es lo más
profundo del ser humano. No hay que modificarlo
y ni siquiera es igual para dos personas. Los
conceptos religiosos son profundamente, no
solamente tolerables, sino respetables,
profundamente respetables. Y eso es lo que
teníamos en la Institución.
[En mi casa había de todo tipo.
Tenía una abuela que era de comunión diaria, la
otra de menos comunión, mi padre que era
republicano… Vivíamos en perfecta armonía. Era
el espíritu de la institución. La armonía
perfecta. Eso respecto a la idea religiosa.]
La base de la Institución Libre
de Enseñanza fue la filosofía krausista. Tampoco
a rajatabla, tampoco, con modificaciones, porque
cada sociedad necesita algo muy especial
inherente a esa sociedad, de manera que tampoco
era esta cuestión de a rajatabla. Pero de todas
maneras era su filosofía. Así nos íbamos
desarrollando en un número pequeño de alumnos,
porque las familias estaban asustadas. Estaban
asustadas por la clase pudiente que llevaba la
contraria a todo esto. Les estábamos dando la
lata, porque ellos lo que querían era que
siguiera existiendo la pobreza, la ignorancia,
para modificar y hacer lo que quisieran con la
clase pobre. Eso se iba a terminar… No podíamos
pero lo intentábamos. Lo intentábamos. La
enseñanza era maravillosa y he seguido con ella
a lo largo de todos los años primero con mis
hijos en casa y después en los institutos donde
he ido, incluso en los colegios que he ido
instituyendo (…).
Estos chicos que
están silenciados,
porque la
enseñanza implica que sean silenciados
El otro día en Tres Cantos (que
lo pasé muy bien, por cierto. Este Tres Cantos
en un encanto). Estuve en un instituto hablando
con los chicos, con los profesores. Estos chicos
eran estupendos. Estos chicos que están
silenciados, porque la enseñanza implica que son
silenciados, que no les da tiempo a preguntar
qué se define en una hora. Estos chicos
debían hacer todo su trabajo en el instituto y
no estar después teniendo que hacer trabajos y
trabajos en sus casas. Que tienen más trabajo
que cualquier adulto de su familia.
Me preguntaban cosas
interesantísimas. Yo les canto el NO. No a las
notas. No a los exámenes. No a la repetición de
curso. NO a las exclusión de ninguna manera. NO
al alumno que sea más torpe o peor fundado. No a
nada de eso. Sí a la comunicación directa
del profesor con el alumno. Sí a dejarle al
alumno que pregunte. Porque seguramente que la
pregunta de ese alumno es la misma que tienen
muchos y no se atreven por timidez. No tenemos
que ser así con los alumnos. Hay que
satisfacerles sobre la marcha porque si en el
terreno de la matemática, la física y la química
te dejas una laguna de algo que estás explicando
no adecuadamente para esa mente, sino de una
manera incompleta, resulta que con todo lo que
viene detrás, ha perdido la clase. Hay que
resolver sobre la marcha. Una cosa son los
objetivos que hay que conseguir y otra es el
currículo que hay que desarrollar.
Una cosa son los
objetivos que hay que conseguir y
otra es el
currículo que hay que desarrollar
Una cosa son los objetivos que
hay que conseguir y otra es el currículo que hay
que desarrollar. Eso es oficial. Al final del
curso ya habré dado tantos capítulos de lo que
ustedes dicen. Pero como lo voy a dar, eso es
cuestión mía. Eso es cuestión mía, porque yo no
voy a pasar por alto que los chicos no estén lo
suficiente maduros para construir un
edificio sin una base apropiada. Eso de ninguna
manera…
He tenido algunos tropezones gordos en el nivel
de la enseñanza. Por ejemplo, en un claustro
tenerle que parar los pies al director. Eso de
ser el director es horroroso. Yo siempre he sido
jefe de estudios. Decir que yo era un profesor
“que mola mogollón” que no suspendía a nadie.
¡Pues claro! Como que no quiero que los chicos
repitan. Porque si hay vacaciones en el verano y
a ti te pagan por estar en tu casa de veranero,
pues tienes que estar pendiente de los que te
han quedado porque no han entendido o porque no
has explicado adecuadamente. De manera que sigue
la ruta durante el verano por teléfono, por
correo, con el cursillo, con lo que haga falta.
Cuando llegue septiembre, el alumno sabrá…
…pero lo
que hace falta es el conocimiento que se
tiene, porque estamos en la era del
conocimiento, no de la memorización
¿Y cómo se ponen las notas?
Me decían los alumnos. Entonces, si no pones
notas, vosotros tenéis que valorar. No el
trabajo que habéis realizado para aprender, sino
lo que sabéis. Porque el trabajo puede ser
enorme, o puede ser momentáneo según la
capacidad del momento que tengáis, pero lo que
hace falta es el conocimiento que se tiene,
porque estamos en la era del conocimiento, no de
la memorización. Estamos en la era de tener bien
asimilados todos los conocimientos para
producir, porque también estamos en la era de la
creatividad. Hay alumnos que son capaces de
hacer un aparato que cualquier profesor
normalito no lo hace. No se le ocurre. Es la era
de la creatividad. No hay que tapar a los
alumnos.
A mí me decían: no a los
exámenes, ¿no? Si yo me tiro 9 meses con un
alumno y con otro ¿necesito un examen? que venís
nerviosos, que venís perdiendo el 50% de las
posibilidades de resultar. Les obligan de cierta
manera a que se apoyen en lo que saben, traen
las chuletas… Esto es fatal! No a los exámenes!
A mí no me hace falta hacer exámenes. Yo hago
controles a ver si es capaz de saber la materia
y la domina. Que hay un tanto por ciento que lo
saben…A los que no lo saben, me dedico y me
ayudan los que sí saben y de camino esos, los
que saben, aprenden lo que es aprender
enseñando. Eso es muy bueno…Que no se comprende,
pues paramos un poco, da lo mismo, paramos hasta
que se esté maduro.
En matemáticas debes practicar
voluntarios. Los sábados a venir a practicar
desde las 10 de la mañana hasta las 2 de la
tarde. Y son productivas al máximo. En cada
mesa, de cuatro en cuatro, uno de ellos cada
semana era jefe de prácticas y tenía que
corregir a los tres compañeros de mesa con el
ejercicio suyo que yo le devolvía estrictamente
corregido. Entonces, claro, el chico tiene que
ver que hay gente que sabe más que él. Este es
otro asunto también muy importante. Tiene que
ver que la nota no sirve para nada, que lo que
sirve es el conocimiento. Es decir, hay que
aprovechar, y me estoy metiendo en un terreno
que no quiero decir que el profesor no lo haga.
Unos lo hacen y otros no. Pero yo solamente lo
que quería decir es que ese espíritu y esa
manera de trabajar en la Institución era muy
bonito. Y otra cosa, es que los chicos se
asustaban y en un curso de profesores de Jaén,
al contar yo el procedimiento que tenemos
que cambiar profundo, que no tiene que ser por
encima, tiene que ser profundo para que no
perdamos inteligencias. Que la gente se nos va,
se nos va a cualquier trabajo de usar y tirar.
Se nos van las inteligencias, y eso no se puede
permitir para un país y para el mundo entero. No
podemos hacer esto.
El libro de
texto lo detesto
Y no a los libros de texto. Me parece fatal. El
libro de texto lo detesto. Valga la redundancia.
Porque un libro de texto, que se edita con un
determinado error, muy propicio en las
matemáticas, supone una perpetuidad hasta que
algún señor se aburre del texto y dice: ahora
otro. Y viene otro tipo de error…. Y me decía
una profesora, muy asustada: ¿y entonces qué
hacen los libreros? El libro es mucho
mejor. El libro de texto supone un libro por
alumno, todo el año. Mi sistema es de 3 a 4
libros, de lectura, de comunicación, más los de
la biblioteca, para que puedan criticar,
aprender, lo que no se les ha podido decir en
clase, porque no podemos ampliar tanto
conocimiento y es muchísimo mejor también para
el librero. No se quedó muy convencida.
El ministerio
debe tener muchísimas presiones
Pero no vamos a ninguna parte,
porque el ministerio debe tener muchísimas
presiones para no hacerme caso (…)
Yo tengo muchísimos proyectos.
Los profesores me aplauden, los de la
universidad de Jaén, de Sevilla, pero no vamos a
sacar el gato del agua ¿por qué? No lo sé, pero
yo tenía la esperanza de con que esta ministra
que procede indirectamente de la Institución
Libre de Enseñanza…
Pero de todas maneras es el Colegio Estudio,
porque la Institución dio lugar a muchas salidas
para la cultura. El Colegio Estudio procede del
Instituto Escuela y el Instituto Escuela procede
de la Institución, porque en aquella época, en
la época ya mía, año 22, yo tenía un libro,
mejor dicho un cuaderno de literatura; pues un
profesor, como yo era la más pequeña de la
generación, me sacaba a recitar, ya que me tenía
un cariño extraordinario. Todos mis cuadernos
son del año 22. Tenía yo 8 años, 9 y 10 años.
Son trozos de poesías en castellano antiguo: “El
cantar de Mío Cid”, Gonzalo de Berceo en
castellano antiguo.
La memoria con esta práctica se
tonifica, porque el ritmo y la poesía, el ritmo
de la música y la poesía, hacen que las neuronas
se acostumbran a hacer esfuerzos en ese sentido
y la memoria se tiene más tonificada. Yo lo
recuerdo, y a veces más valdría que no recordara
tantas cosas…Pero tengo buena memoria. Y no
tengo la culpa. Son consecuencias que yo
quisiera perpetuar esto un poco más… Voy
llegando a la meta, por más que yo lo quiera
prolongar….
Sigamos con lo de la Institución, porque hay una
faceta muy importante y ustedes, que han
tenido el gusto de ir a visitar la exposición
sobre las “Misiones pedagógicas”, el museo del
pueblo. Era un grupo de gente de la
Institución…. Y parece mentira que antes de la
República esto se consiguiera. Esto quiere decir
que una parte de la ciudadanía que quería esta
metodología, pero no querían que sus hijos
pasaran mal rato en el instituto siendo alumnos
libres, se consiguió que el Instituto Escuela
tuviera capacidad para dar títulos él mismo,
cosa que el clero no consiguió nunca y nosotros
sí, y yo me incluyo. Gracias a eso el Instituto
Escuela, yo no, yo he pertenecido a los
tribunales del instituto del Cardenal Cisneros.
En aquella época no había más que
dos institutos: San Isidro y el Cardenal
Cisneros. Como tribunal había tres señores en la
mesa y con 10, 11, 12 años y llevando el número
de asignaturas que la familia quería
porque ni siquiera lo imponía la Institución .
Teníamos una profesora que nos canalizaba
nuestro saber para que contestáramos más o menos
adecuadamente a lo que nos iban a preguntar con
esos libros de texto que la institución no
tenía. No tenía libros de texto. Pero tenía una
capacidad cultural universal como tenía Giner.
No a la
distribución de materias
El maestro tiene que ser
universal. Y nada de extorsionar y romper la
enseñanza. No. El profesor te explica geografía
y tiene que explicar lo que es el ambiente, lo
que es la presión y por qué el aire pesa.
Tiene que tener una cultura tan universalizada
que no haga esta distribución de materias. Esto
es horrible. (…)
En Rusia, Vigotsky vio que si no
se apoyaban las familias con el profesorado y
con los alumnos la cosa iba mal. Porque no
consiste en que haya un conjunto de profesores
que tienen las cosas hacia su lado y otro
conjunto de maestros, más o menos interesados
por las familias, que tiren de otro grupo. No.
Tiene que ser con todos las necesidades a
ver por donde caminamos, a ver qué es lo que nos
apetece, a ver qué es lo que deseamos saber. Y
esto es lo que tiene que cambiar…
Yo pertenecía a ese grupo y yo con los 16 años
recién cumplidos, en virtud de esas libertades
de 3 asignaturas, 7 asignaturas. Bueno, no
importaba nada, ahí iba yo. No me costaba nada,
yo tenía que estudiar. Eso sí ha sido una pega
para mí. Cuando he tenido que clavar los codos
me costaba trabajo, porque como no tenía que
estudiar, que todo lo aprendíamos de pe a pa y
con resúmenes y sin llevar carteras, no teníamos
libros, no teníamos nada que llevar, ni siquiera
un cuaderno. Los cuadernos se iban amontonando y
deteriorando.
Con 16 años,
ya estaba en la Universidad
Con 16 años, en octubre, ya
estaba yo en la universidad. Era la más joven de
la promoción. Y eso es lo que yo quisiera
perpetuar, siguiendo con la idea de estos
simpáticos chicos que he tenido. Otra cosa que
me preguntaban y que viene bien para el sistema
de la Institución, que es fundamental para que
la sociedad no vaya como va excluyendo tan
determinante de esta manera, me dicen, por lo
que tu estás explicando tu eres feminista,
claro. Comprenderás que después de estar tantos
años en la Institución, conviviendo con niños y
niñas, que teníamos las mismas obligaciones, los
mismos juegos, las mismas barbaridades que se
nos ocurrían, yo tengo que suponer que todo
hombre o mujer tiene que trabajar, tiene que
tener todos sus potencialidades al nivel uno del
otro y todos juntos, de manera que esto me
ha costado a mí muchos disgustos y al final
siempre me río.
La coeducación
No sé cómo me las arreglo, la coeducación, la
multitud de denuncias que me han puesto a lo
largo de mi enseñanza de instituto durante el
franquismo. Y lo que no me perdonaba el señor
Francisco Franco era el que yo era promotora de
la coeducación. Eso era horroroso. [Además,
decía que era masona. Yo no sé como podía ser
masona si las mujeres no podían serlo en aquella
época. O sea, la posguerra y lo anterior a la
posguerra, ¡más vale no menealo! Porque entonces
la piedra se va a levantar. Lo que pasa es que
ahora estoy aquí y todo mi afán es que considero
que es un momento crucial para que todos
trabajemos por esto.]
En las
bibliotecas tienen que trabajar los chicos
Hay muchas bibliotecas. No todas.
Más hacen falta. Más hacen falta, pero no una
biblioteca para que digamos qué bonita es la
biblioteca del instituto. ¡Qué bonita la de la
escuela! ¡Qué bien organizados están los libros!
Hay una señora que sabe mucha biblioteconomía y
está hecha una maravilla. En la biblioteca
tienen que trabajar los chicos, ellos. Son los
libros de su manejo diario. No tanto ordenador.
El ordenador es una herramienta importantísima.
Muy mal utilizada. Porque gasta el tiempo que no
deben gastar los alumnos para algunas cosas que
les llama la atención y que no lo tienen en la
vida ordinaria y eso es una mala cosa que el
alumno tenga esa herramienta que va a ser muy
buena para toda su vida y que va siendo cada vez
más difícil de tratar porque estamos en una
progresión de la velocidad de la luz. Dentro de
nada esos aparatos ya no tienen sentido. Ya
serán otra cosa.
Tenemos que
tener bibliotecas, tenemos que tener teatro.
…es que están
silenciados y van a reventar
Entonces, tenemos que tener bibliotecas,
tenemos que tener teatro ¿dónde está, dónde está
la señora del teatro? Teatro para los niños,
teatro para los niños. Vamos a hacer que ellos
digan lo que todavía ellos no pueden decir por
timidez, por temor: “a ver si vas a decir
tal cosa en el colegio. No digas eso “ (…)
Entonces, en esa libertad tenemos que tener a
nuestros hijos, a nuestros nietos, a toda esa
juventud, que son estupendos, que no son lo que
los medios de comunicación nos están diciendo.
¡Que no! ¡Que no es eso! Es que están
silenciados y van a reventar. Que no pueden
decir más de cuatro cosas.
La atención
del niño
Otra cosa que tengo que decir es
el horario. El horario. Que un niño de ESSO, 11,
12, 13 años, incluso 14 años, no tiene
atención más que 45 minutos. A los 45 minutos,
ese cuarto de hora al que está obligado a estar
en el aula es para distraer al compañero, para
decir cositas, para molestar, para aburrirse…
Porque ya está harto. Ese niño o niña tiene que
coger oxígeno, porque consume más oxígeno que
cualquier señor que esté fuera. De manera que
esos niños tienen que oxigenarse. Tienen que
salir al patio, si tienen la mala suerte de no
tener más que patio. Debían tener un jardincito
por pequeño que fuera para correr, para moverse.
¿No es un disparate biológico que esos niños a
esa edad entren a las 8:30 de la mañana? se
sientan en un sillón más o menos duro…
¿No es un
disparate biológico que esos niños a esa edad
entren a las 8:30 de la mañana? se sientan en un
sillón más o menos duro…
¡Que ojo! porque el profesor o la
profesora pueden decir: ¡ese niño me está
molestado! ¡No para de moverse! ¡No me aguantan
los nervios!… y salen después de 20 minutos a
comerse el bocadillo y no se pueden ni siquiera
comunicar libremente, ni mover esos
miembros, y sale a las 2:30 de la tarde para
seguir trabajando con la maleta que se lleva a
casa ¿no es un disparate biológico? Esos niños
tienen que tener una reacción de rebeldía,
aunque no lo estén manifestando, pero
biológicamente están rebeldes, ¡porque no puede
ser eso! ¡Tampoco me hacen caso! ¡Ahí está la
cosa! ¡Ahí está todo!
Ahí está esa naturaleza fuerte que tenemos, la
que en las vacaciones nos íbamos a la playa, en
concreto, y teníamos nuestro horario en
San Vicente de la Barquera, teníamos que hacer
el horario día a día, teníamos que hacer el
resumen de las excursiones que hacíamos.
Teníamos que tener una comunicación entre todos
los profesores y alumnos. Seguíamos el concepto.
Eso es lo que estábamos haciendo en las Misiones
Pedagógicas cuando llevábamos a esos niños
que no sabían ni lo que era un cuadro ni una
pintura, porque ahora todo cambia. Es la era del
cambio tremendo. Los techos más hundidos de los
centros rurales tienen ya televisión.
No tendrán mucho de comer, pero la televisión
les va a tonificar en algún sentido, pero
entonces, había que pintar los cuadros de
los alumnos de la Institución que tenían permiso
para pintar copias de quien fuera, de Velásquez,
de Goya y ¡allá con el cuadro!, en las
camionetas aquellas imposibles. En algunos casos
con burros, porque había sitios que no tenían
acceso con las ruedas, pues íbamos allí, con
gramófonos, aquellos de trompetón y
manivela para que tuvieran música. Me parece que
lo habréis visto en la exposición que ha sido
muy buena “Las misiones pedagógicas” los niños y
los hombres y las mujeres con esa cara de pasmo
¿pero eso qué es? ¿Cómo nosotros no tenemos ni
idea de esto? Era una maravilla. Era el museo
del pueblo. Eso hizo la Institución, que se
terminó en el año 1936. Los profesores
exiliados, los profesores metidos en la cárcel,
condenados a muerte, fusilados, etc., etc.
Tuve que salir
de Madrid
No son solamente los rurales, como cuenta en su
libro Mª Antonia Iglesias. No son solamente
ésos. La Institución tuvo un desastre. Yo quedé
con un exilio interior. Yo tuve que salir de
Madrid…. No quiero levantar la losa. Tuve que
coger otra línea. Yo estaba preparada para
investigar partículas en Alemania y entre el Sr.
Hitler y el Sr. Franco me torcieron bien el
camino. Pero no me importa. No me importa,
porque el camino que escogí ha sido maravilloso.
Puedo seguir diciendo lo que soy, lo que era, y
lo que estoy haciendo y menos mal! Sigo. Soy muy
fuerte. De manera que vamos a ver si ahora damos
un poco de vuelta a esta temperatura que tenemos
entre manos y si queréis preguntarme cuando
termine de mi perorata, que no sé muy bien el
tiempo que tengo, pero estoy llegando ya a la
meta de la perorata y de la vida.
Los profesores
tienen que saber cómo funciona el cerebro del
niño
Se terminó mi investigación de
partículas. Pero mis ganas de aprender siguen.
Yo estoy estudiando neurobiología, porque
considero que los profesores tienen que tener
una formación que no tienen. Tienen que saber lo
que tienen en la mano, que es ese cerebro,
tienen que saber cómo funciona el cerebro de ese
niño, cómo se desarrolla, por qué tienen esos
defectos, que no es autista! ¡Cuidado, no le
pongas eso! ¡Cuidado, que ese niño no puede dar
más de sí, porque tiene un defecto de oído. A
ver qué es lo que está pasando. Tienen que tener
los profesores una base de lo que tienen entre
manos. Tienen que estudiar la neurobiología. No
hay más remedio. Pero si estamos a la velocidad
de la luz, progresando en todos los
conocimientos cada vez mejor, no cada vez peor…
Vamos a ver si lo aprovechamos. Los profesores
tienen que esforzarse un poco. Yo entiendo lo
que les pasa también a muchos profesores.
Estoy asustada porque ahora hay
una serie de profesores que se dedican a
adultos, también como consecuencia de la
Institución Libre de Enseñanza. Eso de vamos a
unir a los de abajo con los de arriba. La
enseñanza de adultos tiene su base en la ILE..
Estáis viendo por qué es el museo del pueblo.
Que le abran a la luz. Que se abran a la
cultura. Que lo pasen bien. En el sentido que yo
digo, que vamos a dar un vivir alegre. Un canto
a la vida, no un canto a la muerte. [Que con
todas las tristezas vamos a ir buscando el
cielo. Ya nos han quitado el limbo, de manera
que no sé lo que va a pasar…bueno, pues iremos
derechos al cielo. Por eso, hay que seguir por
esta ruta sin más remedio.]
¿Qué estamos
haciendo con esta juventud?
Otra de las cosas, la cota de
ampliación de estudios, para que el que sale con
una afición, una preparación adecuada, una
inteligencia apropiada, que pueda ampliar más
que en la universidad. Tampoco ahora funcionan
bien las universidades, cuidado. No importa,
porque con esta universidad que tenemos ahora
podemos seguir ampliando esa cota de ampliación
de estudios que empezó en la Institución, que
empezó con el museo pedagógico. Los maestros,
que ahora tienen centros de profesores.
[que yo estoy deseando de ir sembrando en los
centros de profesores, también en Tres Cantos si
yo pudiera] tienen que tener unión,
comunicación. No una charla y a casa. No.
Un trabajo día a día. Exponer las dificultades.
Salir al corte de esas dificultades. Que los
niños cada día tienen una dificultad nueva, una
alegría nueva, y hay que seguirles. Los niños,
digo, por decirlo de alguna manera, porque los
chicos que yo tuve el otro día tenían 17 y 18
años y pasado mañana están en la universidad.
Entonces ¿qué estamos haciendo con esta
juventud? No puede ser. Tenemos que seguir
contra viento y marea…
Pues todas esas cosas salieron de
la Institución. Y salió un centro para enseñanza
de la mujer en la calle San Mateo,
específicamente para la enseñanza de la mujer,
en donde la mujer ya no tenía que estar
solamente para la procreación (…).
Yo vengo ahora de ese congreso de
las universidades populares. ¡Magnífico
congreso! Un derroche de dinero para que pueda
todo el mundo estar contento y hablando y
promocionando, pero que no es el broche final,
que sea un suma y sigue. Vamos a continuar
sembrando. En la asociación primera que yo
fundé, antes de estar en el instituto de la
mujer en Andalucía, la asociación cultural para
hombres y mujeres, ya llevamos el 6º certamen
literario, pero ahí escribe solamente el que
sabe escribir y no lo que yo quería, y eso que
hemos mandado a no sé cuantos institutos de toda
Andalucía información para que los niños
escriban, para que los niños lean… Eso es otra
cosa, que no leen, porque entre otras cosas no
tienen mucho tiempo, están agotados.
No se está
promocionando la lectura
Pero bueno, no se está
promocionando la lectura, entonces, para que
lean, para que escriban, para que no tengan
timidez, les dije al mandar mi escrito: no me
gustan los perdedores ni los ganadores. Si hay
premiados es que hay un perdedor. Entonces para
nuestro certamen literario no hay un perdedor,
porque el que no tiene un premio determinado,
tiene un lote de libros. Bueno, pues ya llevamos
4 años y ningún niño ha escrito a través de
todos los institutos de Andalucía. Ni un niño.
El año pasado escribió un niño. Un niño. Nos
reunimos el jurado, para hacerlo con todo rigor,
totalmente anónimo, los niños aparte y los
adultos por otro… Aquello no era un niño,
era una señora o un señor mayor, nos estaban
tomando el pelo. Estaba contando las angustias
de la guerra y de los niños ¡qué horror! Quien
escribe esto es un injerto de viejo. ¿Esto qué
es?
Bueno, cuando vimos lo que era,
resultaba que la niña había encontrado el diario
de su abuela y le había causado tal efecto que
salía la poesía. ¡Una niña en toda Andalucía al
cabo de 5 años de este certamen literario! Soy
un desastre, no consigo lo que quiero! Hace
falta leer y escribir. Sobre todo dejarse
sentir.
Yo quisiera que no os quedara
ninguna duda de lo que es la Institución Libre
de Enseñanza, pero como decía yo en las
universidades populares el otro día, que no sea
esto solamente decir: ¡Hay que ver lo que
pasaron durante la República, lo que tenían a
mano, lo que estaban haciendo, porque esto fue
reflejo de la República, esa cultura de la gente
institucionista. Fernando de los Ríos, Ministro,
era de la Institución. Don Manuel Bartolomé
Cossío fue Primer Presidente Honorario de la
República y fue promotor también con Giner de
los Ríos de la Institución. Y si veis calles en
Madrid que no sabéis bien quiénes son, son de la
gente de la Institución, que todavía se
conservan, contra viento y marea. Eran de una
intelectualidad propicia a que saliéramos de
donde estábamos metidos. Como decía Machado: una
España que ora y bosteza, pero que cuando coge
su inteligencia da con fuerza para todo. Y es
verdad. Y estamos en un magnífico momento. Vamos
a aprovecharlo.
Nuestros chicos
lo pasan mal, un respeto también a toda la
juventud
Vamos a ver si le damos la vuelta
a todo porque nuestros chicos lo pasan mal. Lo
están pasando muy mal…
Porque encima, yo que estoy haciendo ahora
cursos para el profesorado. Y el profesorado
dice: ¡Cómo están! Están enfermos. Tienen un
stress horroroso. (…) Los chicos son como fieras
cornupias cazadas en el Orinoco. Son terribles
los chicos. ¡Hombre, por Dios! Esto no se puede…
Están los medios de comunicación así… Están
todas las cosas así…Con un respeto también a
toda la juventud, que tiene todas mis
esperanzas. (…)
Desde el público se pregunta a
Doña Carmen:
¿A qué acusa
usted entonces el que puedan ser así esos
muchachitos que se comportan tal mal y parecen
fieras cazadas en el Orinoco? ¿A qué cree usted
que pueda deberse ese comportamiento?
Carmen Michelena.
¿Te digo lo que pienso, aunque sea duro? Desde
la cuna empieza el niño a tener agresividad.
Porque su madre tiene que ganar, porque no tiene
bastante para los dodotis. Pues bien, en
lugar de dodotis, que son muy caros, unas gasas,
como las ha habido toda la vida, y de paso,
benefician el culito del niño.
[Hay un cambio en la grabación de
la cinta y se pierde parte de la exposición de
Michelena. Habla sobre los efectos de la manera
hoy en día de criar al bebé y sus repercusiones
posteriores, entre otros aspectos, de la
alimentación con biberón en lugar de la
lactancia materna]
Los que tenéis hijos en edad de
ir a la universidad, como la señora Cabrera no
lo remedie, el plan que están preparando…. 4
años de facultad. Van a quitar uno… Bueno…
Nosotros teníamos 4 años también pero
suficientes para tener conocimiento de todo y,
sobre todo teníamos el profesor que ya veía las
condiciones de cada uno y estábamos desde el
primer momento más especializados en lo que
parece ser que valíamos más. Yo, por ejemplo, la
química orgánica la detestaba.
Desde luego, no hubiera sido
nunca una química orgánica, pero en cambio,
Enrique Moles. ¡Esa es otra de las cosas de las
que teníamos en esa época de la República. Hemos
tenido a Einstein, hemos tenido a Madame Curie,
pero no de pasada, sino para trabajar con
nosotros. Todas las universidades del mundo nos
mandaban los profesores ¿por qué? Porque estaba
Enrique Moles, detector de partículas, cuando
nadie hacía de esto, él ya estaba detectando
partículas. Yo era su alumna predilecta y estaba
entusiasmada con ser alumna de Enrique Moles.
Arturo Duperier, un físico de radiaciones
cósmicas. Primera cabeza mundial en el exilio.
Se fue a Inglaterra y en Inglaterra le regalaron
todo el laboratorio. El señor Franco le dejó en
la frontera y no le dejó entrar en el
laboratorio y se murió de asco. La primera
cabeza mundial en radiaciones cósmicas…
Vamos a
instituir la lectura para los niños, la
escritura para los niños
(…) Nosotros vamos a formar al
hombre, que luego el hombre hará lo que quiera,
pero vamos a formarlo bien. Por eso las escuelas
infantiles tienen tantísima importancia,
tantísima importancia.
Tengo un proyecto preciosísimo de
escuela infantil en la carpeta. Se asustan de lo
que digo. Se asustan. A ver si se consigue que
los chicos del instituto, una hora a la semana
hagan lectura comentada. No es un
leeeeeeerrrrrrr y ya está! No. cada uno tiene su
libro. Su libro que se lleva a casa, su libro
que lo quiere, a veces debajo la cama, para
cuando se va a dormir y de vez en cuando lo lee,
que lo subraya porque es su libro. Vamos a
instituir su libro, porque está el ordenador, y
el ordenador es frío, sin humanidad. Es una
herramienta. Vamos a instituir la lectura para
los niños, la escritura para los niños. A ver,
escribe, no te dé vergüenza, a ver…qué se te ha
ocurrido, un cuentecito, vamos con cuentecitos
para no dormir, cortito, cortito. Y dibuja,
dibuja.
A los niños que están en la maternal se les
dice: colorea, colorea, y el niño, que lo
que tiene son las tres dimensiones, porque está
empezando a conocer el mundo, y quiere tocar y
tiene que coger las tres dimensiones, tiene que
ver las dos dimensiones del papel y tiene que
colorear. Como se salga de la línea, ya tiene
una nota mala. Pero Señor, si es que el niño no
quiere esa línea. Si es quiere otra cosa, que
coge el negro, pero no es que esté horrorizado
por la vida, el niño coge el negro porque es el
que más le llama la atención porque es el que es
más oscuro.
La necesidad de que esos
profesores tengan unos conocimientos, ya no de
psicopedagogía de la facultad, sino profundos de
lo que es un niño…hacen cosas de penita…
(…) Una cosa que quería aclarar, a ver si esto
cambia también… En ninguna facultad de
matemáticas, químicas, físicas, en ninguna
hay ni asignaturas ni especialidad de la
docencia, pues no señor, el químico, viene a la
industria, a la investigación, al laboratorio, a
lo privado. Como no le sale nada, se prepara 103
temas y papapapapa, con más o menos trabajo,
prepara las oposiciones y se va a explicar sin
conocer lo que tiene en la mano, que es el
elemento niño. No lo conoce, le suelta y se
queda asustado de lo que tiene que explicar, por
ejemplo química, exactamente, nosotros los
químicos tenemos matemáticas, física y química
todo el tiempo. Los físicos no tienen química
más que un año, por lo que están más limpios que
una patena. Pero cuando llegue la oposición
tiene que tener la mitad del programa de física
y la mitad de química… En ese sentido van fatal.
Sueltan el
tema que han aprendido sin fundamento pedagógico
Entonces ¿qué hacen? Soltar el
tema que se han aprendido sin fundamento
pedagógico y menos aún sin fundamento
psicológico, con exámenes y con datos, pues ya
está… no hay comunión entre el niño y el
profesor.
No es un maestro, que es la
palabra más bonita. El maestro es un director de
espíritu, de conciencia y de saber. No es un
maestro. Es un señor que va ahí a contar el
rollo que ha aprendido y que pueda ser que tenga
mucha afición, pero que le cuesta mucho trabajo.
Lo primero que hacen es entrar mal en la clase,
diciendo… ya voy con las fieras…que me están
esperando las fieras…pero… en fin, ya voy…
Entra, arrastrando los pies. Los chicos dicen:
ya viene el rollo, a callar que viene el rollo.
Ya empieza lo que el profesor está diciendo. Ya
empieza la violencia… Esos profesores no están
formados. Vamos a probar con los que tienen
ganas de no hacer eso. Tienen ganas, pero no
están dispuestos, porque entre otras cosas no se
dan cuenta de que tenemos los docentes unas
vacaciones encantadoras, cuando son verdaderas
vacaciones y también estás pendiente de que
tienes tres alumnos de que se han quedado
colgados y que tienes que seguir con ellos,
porque deberías haber estado trabajando más
tiempo con ellos.
No hace falta
temas enormes
Los chicos deberían tener tiempo
de hacerlo todo en clase…No hace falta llevar
esas velocidades supersónicas, no hace falta
unos temas enormemente amplios, porque no vamos
a llegar a enseñar todo lo que estaba
poniéndose en evidencia…Cada vez va ampliándose
más la filosofía y todas las humanidades. Hay
tiempo, hay tiempo de sobra en clase….
Pregunta:
Ha habido detalles de su intervención, como la
cantidad de horas que se pasan sentados nuestros
niños, la falta de juego, la cantidad de libros
que llevan, los deberes. Y muchos padres ¿qué
hacemos con ese sistema educativo?
Carmen Michelena.
Estoy entusiasmada de Tres Cantos ¿por qué se
creen ustedes que he venido tan entusiasmada y
con tantas ganas de estar con ustedes? Aquí
podemos sacar algo bueno. Por lo pronto lo de la
lectura ¿Por qué no? Luego los juegos en los
niños con esa lectura. Por ejemplo, en la
Institución leíamos libros de caballería o de
Lope de Vega, por ejemplo: la Dama Boba o libros
de la canción de Rolando, el Cantar de Mío Cid y
luego nuestros juegos, que solían ser de estar
peleando y haciendo barbaridades. Tenían un
reflejo de lo que leíamos, hacíamos los zancos,
que los hacíamos de carpintería, porque hay que
hacer de todas las habilidades, otra cosa de la
Institución. El cuerpo hay que tonificarlo tanto
como el cerebro. Los alumnos calzaban los
zancos, otros se montaban a caballo, que eran
los zancos, y el jinete siempre, por el tamaño,
llevaba una lanza otro zanco, y hacíamos
batallas en la Canción de Rolando y luego
Rolando tocaba el olifante. Todo esto significa
que habían asimilado lo que habían leído, porque
no es cosa de decir, ¡cuánto saben los niños!
Esto se da por hecho. No hay dosis de hombres,
poco a poco va entrando el afán por la cultura.
Yo hace poco, en una reunión en
el Instituto de la Mujer en Baeza, cantando
alabanzas a esta memorización por la literatura,
por el ritmo y por la música… yo decía, me
acuerdo, de cosas en castellano antiguo, a mis
ocho años:
En
el nombre del padre
Que fizo toda cosa
De Don Jesucristo
Fillo de la Gloriosa……
No se me ha olvidado. Y sin la
memorización horrorosa, que no sirve para nada,
[por ejemplo mi nieta, de unos 13 años,
hace unos trabajos maravillosos, con Internet,
fotografías en color, saca la literatura de cada
cosa, lo pega allí. Esto significa un 10, otro
10, otro 10. ¡A la semana no se acuerda de nada!
¿Para que les sirve eso? Para el ordenador, que
aprenda otras cosas! El ordenador es un
instrumento bueno, ¿por qué no? Sí señor, pero
que no desperdicie el tiempo. Hay que
aprovecharlo.]
Pregunta; A mí me ha gustado mucho lo que ha
dicho del krausismo. La influencia de la
educación alemana. Y eso aquí no germinó, porque
ahora mismo el krausismo lo que quiere es que
haya una integración del triángulo ese que ha
citado tan bien [profesores, padres y alumnos],
pero la pregunta mía es: ese triángulo aquí
todavía no….
Carmen Michelena:
Porque ustedes no se lo proponen fuerte
Pregunta:
Bueno, algunos nos lo hemos propuesto un poco,
pero no todo lo fuerte que era necesario
Carmen Michelena:
Es que los profesores no se encuentran muy
propicios. Son sufridores, pero no intentan
modificar los motivos del sufrimiento. Están
sufriendo mal. Yo tengo un amigo que dice: yo
quiero ser todavía alumno, ese número uno de su
oposición, yo quiero ser toda la vida alumno, no
quiero ser profesor… Pero chico, ¿por qué?
(…) Es necesario ese triángulo.
Es necesario comprometer a los profesores. Me
voy a meter con ellos. Voy a intentar a ver si
me quieren oír.
Rodrigo: Hay muchos profesores
aquí…
Carmen Michelena:
Hay muchos aquí. Yo no atento contra los
profesores. Ni hablar, ni hablar. A ver, alguien
más….
Pregunta:
Muchas de las cosas que ha dicho usted las he
discutido con muchas personas y el esquema
actual, que usted ha criticado tan justamente,
algunos, creo que en minoría, lo hemos criticado
muchas veces, pero los papás no quieren que sus
niños aprendan. Los papás quieren que los
aprueben, porque además los papás quieren que
los niños ganen dinero y ahí está el problema
que tenemos los papás y la enseñanza.
Carmen Michelena:
Vamos a intentar que el sector de los papás esos
nocivos, como consecuencia de los años que hemos
pasado… Mira, voy a hacerte una aclaración: Mis
hijos mayores no han pisado un colegio. No han
pisado un colegio, porque los papás que quieren
eso otro que tu estás diciendo… ¿por qué te
crees que llevan a sus hijos a los colegios esos
de las dominicanas, porque es una etapa social
maravillosa, ¿comprendes? Porque son
impositivos, es la clase adinerada y van a
codearse con gente que ya está colocada en
el status social que a ellos les apetece.
Lo de la enseñanza es lo de
menos, pero unos castigos horrorosos, ¿pero es
que tu puedes consentir que a tu hijo le hagan
eso?, ¿pero cómo se supone que un niño pueda ir
con zapato a su casa porque ha tenido un
despliegue de rebeldía? Déjale que se rebele. A
ver por qué es rebelde. Vamos a buscar la
raíz de esa rebeldía. Bueno, pues le quitan el
zapato y se va a su casa con un zapato sí y otro
no… En Lanzarote, en Arrecife ¿qué os parece?
Pero un niño que protesta por la guerra de Irak…
le suspenden. El único suspenso del curso. Pero
bueno, ¿qué ha pasado? El niño lloraba a lágrima
viva, moqueando, desesperado y de todo por su
suspenso. ¿Por qué esta ofensa? Porque protestó,
porque, en efecto, la guerra de Irak… lo que
había oído en su casa…. Yo le dije a la madre:
pero tú, que eres tan liberal, ¿por qué le
mandas al niño a ese colegio? (…)
Por qué creéis que es suave el Colegio Estudio.
El Colegio Estudio como he dicho hace un rato,
se deriva del instituto-escuela. Escuela porque
es el mismo sistema pedagógico, pero se le daban
las notas allí y no tenía que ir al instituto.
Yo me lo pasaba bomba en el instituto, me
divertía muchísimo, pero no todo el mundo. Yo he
sido de otra manera y eso es inherente a la
naturaleza de cada uno.
La
rentabilidad más fuerte en un país es la
educación
¿Por qué salió el Colegio
Estudio? Porque había una clase adinerada que
estaba dispuesta a que esa parte cultural era lo
que iba a producir, porque la rentabilidad más
fuerte en un país, y parece que los políticos no
se enteran, es la educación. (…) lo más positivo
para un país, para el mundo entero, es la
educación de sus ciudadanos.
Esos padres, crearon la asociación, la
aristocracia del dinero, juntaron un dinerito,
fundaron el colegio fuera del casco de la
población, el Colegio Estudio, y cuando yo le
decía a Jimena. Jimena: ¿cuántos alumnos
tienes?, y decía: calla, calla, que me da
vergüenza decirte que pasamos de 2.000. Pero
claro, van a ir porque está fulanito,
menganito, zutanito. Es, más o menos, como el
colegio de las Maravillas en otro sentido
¿cuántos políticos han salido del colegio de las
Maravillas? Pues para codearse unos con otros y
ya está. Y los padres están tocados de ese
virus. De eso tendríamos que hablar otro día…
Ese virus es tremendo. Ese consumismo
escandaloso, de usar y tirar. Pero bueno, como
se puede entender que un chico que no hace nada.
Mira, que tu trabajo es estudiar. El trabajo hay
que llevarlo con alegría, porque no es una cosa
horrorosa. Desde luego, yo no he trabajado
nunca, porque he hecho lo que he querido, porque
me ha gustado, pero encima exigen, dame dinero,
me tienes que subi…r, que han subido las cosas
que en lugar de darme tantos euros, me tienes
que dar cuanto..s. Pero, ¿esto que es? Esto ya
tropieza con la moral, porque si vamos a
estudiar esto a otro nivel, hay quien no tiene
dinero para el bocadillo. Uno de los niños esos
tan simpáticos me decía que eso es una utopía.
Una utopía es el sumum de la belleza.
Alimentamos la utopía porque
estamos creyendo que es el sumum de la belleza
lo que queremos y nos vamos a aproximar como los
números, hacia el infinito, aunque no lleguemos,
pero nos aproximamos tanto como queramos. Si,
si, pero es que los hombres nacemos egoístas
¿cómo, tu eres egoísta? Pones la mano delante
para que no te copie el compañero. A ti te piden
los apuntes y no se los das. A ti te dicen, oye,
me falta para el bocadillo, ¿me das un euro, y
no se los das? Ah, no, porque eres egoísta,
porque, ¿tu no sabes que, según Rousseau, el
niño nace bueno y la sociedad le hace malo. Pues
es verdad, ¿y quien es Rousseau? Pregunta, y
tiene 17 años.
Hace falta esa cultura universalizada, que no
tengan esas pegas los chicos, como me decía uno
de los alumnos, que yo hago unas frases muy
raras, a puerta abierta, y me decía un
chico que no le entraba la regla de la raíz
cuadrada. Eso es horroroso vamos ¿pero tú sabes
lo que es la raíz cuadrada? Y dice: sí, una uve
con un rabo. Eso es lo que hay que evitar. Esos
errores, como tienen los niños, que van a
edificar sobre una base falta y, al final, no es
el fracaso escolar, es el fracaso posterior que
viene como consecuencia. Son muchas
consecuencias malas, entre ellas la
indeterminación….
No escribo, porque soy socrática.
Yo soy socrática y no tengo a un Platón que me
escriba. Porque además no le voy a consentir a
Platón que escriba lo que le dé la gana, pero
sí quiero contar, porque la palabra es el don
más bonito que tenemos.
(*) El encuentro con Doña Carmen
duró más de dos horas, por motivos de síntesis
se han suprimido algunos pasajes que son
irrelevantes para el contenido general de su
charla. Si desea una transcripción literal
completa, puede solicitarlo en:
www.otraescuelaesposible.com